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El bendito lote de La Picota

La encuesta que revelan hoy la Universidad del Rosario y EL TIEMPO sobre lo que están sintiendo y percibiendo los jóvenes trae un dato revelador: casi seis de cada diez consideran que el problema que más los afecta es la inseguridad en las calles. Incluso, por encima de la falta de empleo (43 por ciento) o la falta de acceso a educación superior (21 por ciento).

Basta con preguntarles a los hijos o a los amigos de ellos para entender por qué los agobia la inseguridad. Las respuestas florecen: los asaltan en el transporte público, los atracan a plena luz del día para robarles computadores y celulares, los intimidan en las esquinas para que den las claves de Nequi o los abordan para ofrecerles drogas y cosas por el estilo. Y si van en bici, temen que en cualquier recodo aparezca el asaltante.

Son presa fácil de los hampones.

Y si los jóvenes viven atemorizados, qué decir de papás y mamás. No dormimos esperando verlos sanos y salvos en casa. Les hacemos miles de recomendaciones para tenerlos ubicados. Y si hay que ir por ellos en la madrugada, lo hacemos con tal de evitar riesgos innecesarios. Así no se puede vivir. Por eso apoyo cualquier anuncio que se haga en torno a garantizar una mejor seguridad para la ciudad y sus ciudadanos. Por eso confío en el comando élite que creó la Alcaldía en coordinación con la Policía para atacar a las organizaciones multicrimen que se tomaron la ciudad. Y confío en que no sea una estrategia más, un gasto más o un globo que nos echan para mejorar las cifras de seguridad, que han desmejorado justo allí donde más preocupa a los jóvenes y a la ciudadanía en general: el atraco y el homicidio.

Este grupo élite, dicen las autoridades, está conformado por personal experto en atacar organizaciones criminales que hoy controlan el hurto de celulares, el robo de carros y motos, las redes de narcotráfico, la extorsión o la trata de personas. Pueda ser que la combinación entre inteligencia, tecnología y mujeres y hombres preparados sea la que estábamos esperando para vivir tranquilos. O al menos, alejados de la zozobra y el miedo. Confiemos.

Dos grandes nubarrones, sin embargo, aparecen en el horizonte de esta estrategia: que el grupo élite capture a los criminales y que estos queden libres por decisiones judiciales. Y, segundo, que no tengamos dónde meterlos presos.

Esta semana, para no ir muy lejos, revivió la discusión en torno al hacinamiento en estaciones, uris y cárceles de la ciudad. No hay dónde recluir a tanto criminal que la policía captura y judicializa. Y por eso no es extraño que las propias víctimas digan que la policía las persuade de no denunciar porque probablemente no pase nada.

La pregunta se la planteó el periodista Gustavo Gómez al ministro de Justicia, Néstor Osuna: ¿qué pasa con el lote aledaño a la cárcel La Picota que desde hace años el Distrito viene solicitando para ampliar en 3.000 el número de cupos para condenados por distintos delitos?

La respuesta del jefe de esa cartera fue que la alcaldesa Claudia López había cambiado las reglas de juego, pues tras comprometerse a pagar la construcción de la nueva estructura, ella dijo después que eso le correspondía al Gobierno Nacional.

López, por su parte, fue tajante: “Eso es mentira”. Y me anexó todas las comunicaciones que se han enviado, desde el 2021, al Inpec, la Uspec, el Ministerio de Justicia, el viceministerio y hasta la propia Presidencia, en las que Bogotá insiste en la propuesta de construir una nueva cárcel distrital en ese bendito lote y, a cambio, asume los estudios y diseños y la construcción. Ese tire y afloje no es nuevo. Y así se nos han ido los años sin que se resuelva algo tan simple, digo yo, pues el terreno existe y la plata la pone la ciudad. ¿Entonces? Mientras tanto, en el Congreso ya se radicó un proyecto que sigue generando controversia: el de la humanización carcelaria, que pretende sacar, entre otros, a miles de personas condenadas por hurto, es decir, a los victimarios que hoy aterrorizan a nuestros muchachos.

Bogotá | Metropolitana

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2023-05-28T07:00:00.0000000Z

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