Vargas Lleras se consolida como la principal voz de la oposición al gobierno de Gustavo Petro.

En sus documentos y en una gira por el país critica a Petro y pide ‘defender la institucionalidad’.

Esta semana, el presidente Gustavo Petro graduó a Germán Lleras Vargas con un calificativo que muestra la importancia que ahora le dan en la Casa de Nariño a las críticas del exvicepresidente: “Mi opositor es un depredador laboral”, escribió el jefe de Estado en su cuenta de Twitter.

Vargas Lleras, por su parte, replicó: “No veo por qué les va a molestar la crítica, en especial la mía que es con argumentos, informada y muy respetuosa (...). No acudo a vías de hecho, no activo primeras líneas, no promuevo paros, no cierro vías”.

El episodio refleja la fuerza del resurgimiento público de una de las figuras políticas más reconocidas, que tras su descalabro en las presidenciales del 2018 —en las que muchos lo daban como fijo ganador—, cuando no alcanzó a pasar a la segunda vuelta, decidió retirarse a sus cuarteles de invierno.

Y lo hizo de tal manera que muchos pensaron que era el fin de su carrera. El año pasado, para las elecciones de Congreso, reapareció en avisos de prensa y cuñas en radio y televisión para ayudar a los candidatos de su partido, Cambio Radical, y entonces tomó fuerza la versión de que inscribiría su nombre a una candidatura presidencial de último momento para hacerle contrapeso a Gustavo Petro.

Los resultados de las votaciones de marzo no fueron propicios para Cambio Radical y Vargas desmintió a los que hablaban de un nuevo intento por la Presidencia. Petro se impuso y el exvicepresidente siguió opinando de la realidad nacional desde su columna en la edición dominical en EL TIEMPO y desde la cual se consolidó como uno de los dirigentes más informado y un crítico agudo de los gobiernos de Iván Duque y, ahora, del primer presidente de izquierda de Colombia.

Con la presentación de las reformas sociales del llamado ‘gobierno del Cambio’, a principios de este año, volvió a la escena política. En febrero radicó personalmente una contrarreforma a la salud a nombre de Cambio Radical, que junto con el Centro Democrático son los dos partidos que están formalmente en la oposición.

En ese momento, Petro trinó: “Indudablemente para que Germán se mueva así es porque hemos pisado una de las grandes vértebras de la acumulación de riqueza en Colombia”.

Los constantes dardos presidenciales, y también los de varios de sus principales alfiles en el Pacto Histórico, reflejan el impacto que está teniendo la voz de Vargas Lleras. Según la última encuesta con líderes de opinión realizada por la firma Cifras & Conceptos, su columna semanal es la segunda más consultada entre las de todos los opinadores públicos del país.

Y, desde hace unas semanas, decidió incursionar como analista en 6 a. m. de Caracol Radio y empezó una gira para presentar su diagnóstico de la realidad nacional. En marzo fue a Montería y Pereira; en abril, a Cali y Bucaramanga; en mayo estuvo en Ibagué, Neiva y Medellín, y la próxima semana irá a Armenia.

Asiste a encuentros con empresarios, representantes de gremios, líderes y consejeros de juventud, entre otros. En todos los espacios ha dicho que las elecciones del 29 de octubre deben ser también un referendo regional: “Tras el ‘balconazo’ y lo visto en los últimos días, nos debe quedar claro que quieren y vienen por todo. Hay que defender la institucionalidad y nuestros valores democráticos”, reitera.

Y frente a la reforma laboral del Gobierno señaló que “solo busca satisfacer a 1,2 millones de personas sindicalizadas y a sus élites. Es decir, menos del 5 por ciento de los trabajadores colombianos”. Y ha expresado incluso su extrañeza de la actitud tomada por el expresidente Uribe. “Nos hemos sentido bastante solos en la labor de oposición. No hemos entendido la actitud del doctor Álvaro Uribe, tan beligerante en otras épocas y tan silencioso cuando más lo necesitamos”, dijo ante empresarios en el Club Campestre de Medellín.

El presidente Petro, por su parte, replica los mensajes de miembros del Pacto Histórico que cuestionan a Vargas. “¿Qué es lo que pretende Germán Vargas? ¿Reencaucharse políticamente sembrando pánico económico?”, escribió la representante Mafe Carrascal en un mensaje que el jefe de Estado puso en su cuenta de Twitter.

Andrés Segura, analista y consultor político, dice: “Vargas Lleras está buscando ocupar un espacio huérfano de antagonista al Gobierno Petro, un terreno que otros actores decidieron abandonar. Este nuevo escenario le permite a Vargas Lleras reposicionarse en la agenda y al Presidente le entrega un antagonista que necesita”.

Si Vargas piensa en las presidenciales del 2026, dicen sus allegados, solo él lo sabe. Por lo pronto, mantiene encendido el debate público y con argumentos sobre las políticas del Gobierno y a unir fuerzas, incluso más allá de Cambio Radical, para las elecciones de octubre, que en cierta forma será una medición al Gobierno de Petro.